¡Después de 32 años, Perú logra una presea en los Juegos Olímpicos París 2024!
Después de 32 años, el Perú vuelve a vivir una alegría olímpica, esas que nos marcan, que nos conducen a un torbellino de orgullo y festejo, de sensaciones que muchas veces nos han marcado penas y tristezas. Pero hoy es momento de sonreír, de reír, de ser más peruanos que nunca. Hoy STEFANO PESCHIERA LORET DE MOLA inscribió su nombre en la gloria olímpica al ganar la medalla de bronce en el deporte de la vela, modalidad Dinghy masculino – ILCA 7 en los Juegos Olímpicos París 2024. “La patria te aplaude Stefano, este triunfo lo celebra el país”, le dijo el presidente del Comité Olímpico Peruano, Renzo Manyari. “Arriba Perú”.
Luego de muchos días de tensión por las postergaciones en las aguas de Marsella donde se realiza este evento, este miércoles se realizó la regata que primero fue aplazada por falta de viento pero, luego fue retomada. En el marcador final, El primer lugar fue para el australiano Matt Wearn y la medalla de plata para el de Chipre, Pavlos Kontides.
“Lo logramos, lo logramos, viva el Perú carajo”, fue lo primero que dijo Stefano luego de salir del mar al enviado especial del Comité Olímpico Peruano en Marsella. “Vamos Stefano, gracias Stefano” fueron los gritos de los peruanos que volvemos a festejar después de 32 años una medalla en un torneo olímpico. Edwin Vásquez en Londres 1948 ganó el oro en tiro, Francisco Boza la de plata en tiro fosa olímpica en Los Angeles 1984, la selección de voleibol femenino en Seúl 1988 obtuvo la de plata y Juan Giha en tiro Skeet la de plata en Barcelona 1992. Hoy Peschiera se suma a la galería de héroes deportivos de la patria.
“Esta medalla es un sueño cumplido desde los cinco años que mi abuelo me enseñó a navegar. Este deporte es bonito y complicado. Esto significa mucho orgullo, felicidad y tranquilidad, fruto del trabajo con mucho profesionalismo, con apoyo de gente el apoyo de un país, de instituciones y mis auspiciadores con mucho apoyo de gente que agradezco. Queremos un país unido. Donde un peruano no sea enemigo de otro peruano sino que nos apoyemos todos, para salir adelante. Yo no creía en la medalla, pero mi entrenador me dijo y lloré. No soy mucho de llorar, hace muchos años era un objetivo. No sabía si podía lograr esto, luego de historias difíciles hemos logrado esta medalla”, dijo Stefano.