El presidente del COP tocó las fibras más sensibles de los asistentes al contar la historia de amistad, esperanza y respeto entre Jesse Owens y Carl Luz en los JJ.OO. Berlín 1936.
Uno de los momentos emotivos de la Noche de Gala Olímpica donde se premió a los mejores deportistas y entrenadores 2022 y en el que se reconoció a los deportistas olímpicos nacionales de todos los tiempos, fue cuando el presidente del Comité Olímpico, el Dr. Renzo Manyari Velazco dio su discurso a los presentes en la Huaca Pucllana
“Como bien mencionó Iván Dibós, la historia de nuestra participación como delegación en Juegos Olímpicos se remonta a Berlín 1936 con un primer viaje de un mes que zarpa desde el Callao en el Vapor Italiano “Orazio” y que dibuja el sendero de los sueños olímpicos hasta Tokyo 2020”, indicó Renzo Manyari.
“La máxima cita del deporte mundial superó dos guerras mundiales y la reciente pandemia del COVID-19 y es que la resiliencia forjada en el crisol de la llama olímpica no conoce de imposible y se eleva hacia la eternidad del firmamento donde la historia que ustedes construyeron se forja en las estrellas y constelaciones que guiarán con el ejemplo de la excelencia a las futuras generaciones”, agregó Manyari Velazco.
“Es sobre ese ejemplo de vida es que quiero centrarme ahora. De los tantos paradigmas de grandeza y deportividad de la raza humana. Quiero recordarles la que justamente se gestó en los Juegos Olímpicos de Berlín 1936. Muchos conocen la historia de Jesse Owens y Carl Luz Long. Carl era el “ideario de la raza aria”, alto, atlético, rubio. Jessie la antítesis de aquella premisa, de una familia con recursos económicos muy escasos tuvo que trabajar desde los 6 años recogiendo algodón en el Sur de los Estados Unidos y afroamericano”, indica el titular del COP.
“Ambos coinciden en la prueba de salto de longitud donde Jessie iba perdiendo por cuanto sus dos primeros saltos habían sido declarados nulos. Si Jesse fallaba el tercer intento Carl se consagraría con la medalla de oro. Sin embargo; decide darle un consejo, en una de los mayores gestos en la historia del de juego limpio, amistad, respeto y excelencia, le indica que debe saltar un poco más atrás para no hacer nulo. Consejo que Jesse hace suyo y en el tercer intento significó que fuera válida y Jesse obtuviera la medalla de oro en dicha prueba. Como saben Jesse logró 4 medallas de oro en esa edición” señalo el presidente del COP.
“Pero la historia no termina ahí. Se funden en un abrazo eterno que marcó el inicio de una amistad que mantuvieron hasta los últimos días de Carl. Este último fue destinado a Sicilia en la operación Husky donde es declarado desaparecido en acción dejando un hijo huérfano. Sin embargo; Carl antes de partir al futuro incierto de la guerra deja una carta a Jesse donde le pide que viaje a Berlín y hable con su hijo a fin que le cuente como eran los tiempos antes de la guerra y le recuerde la bondad del espíritu humano forjada a través del olimpismo. Con los años Jesse se reúne en el mismo Estadio de Berlín de 1936 con el hijo de Carl y cumple el último deseo de su amigo. Luego Jesse fue el padrino en la boda del hijo de Carl”.
“Es una historia que toca las fibras más sensibles de cualquiera porque vemos como el deporte superó la muerte, la guerra, el racismo y que en las horas más dramáticas de la historia humanidad el olimpismo propone un mensaje que siempre prevalece UNIDAD, PAZ Y ESPERANZA”
“Hoy como tantas otras veces de la historia de nuestra patria, el deporte, a través de su ejemplo de excelencia mis siempre admirados olímpicos, se volverá alzar con el alba como luz de esperanza, de amistad, respeto y excelencia que brindará paz, sentido de pertenencia y unidad entre todos los peruanos. No hay gloria más grande para una nación hoy en día que escuchar como su bandera se eleva al son de las sagradas notas de su himno nacional en reconocimiento a la victoria de sus hijos e hijas sobre cuyos hombros cuelga la medalla de oro, cuelga la gloria y victoria eterna”.
“Finalmente, quiero agradecer a cada uno de ustedes por compartir con su Comité Olímpico Peruano la memoria de su esfuerzo y dedicación en favor del Perú. Quiero que se retomen el contacto con su casa, que es el COP y que siempre tengan en claro que nos debemos a ustedes, porque el comité olímpico peruano va de la mano SIEMPRE CON LOS DEPORTISTAS”.
¡Vivan los OLY!”